Elecciones 2019: la pelea será voto a voto hasta el final

A menos de un mes de las primarias, la polarización obliga a los candidatos a salir a buscar "el voto difícil".

Urnas
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No hay encuestador y opinador político que en los últimos días no haya pronosticado una "polarización extrema" respecto a las primarias del 11 de agosto. Falta menos de un mes. "Juntos por el Cambio versus el Frente de Todos", indica el programa central. El resto apenas puede hacer notar sus quejas impotentes.

El candidato presidencial del Frente de Izquierda-Unidad, Nicolás del Caño, días atrás apuntó en charla con este medio contra "la polarización" que, a su entender, impulsan por conveniencia propia macristas y peronistas/kirchneristas. Roberto Lavagna ve también enflaquecida su candidatura impulsada por Consenso Federal (un rejunte de sectores peronistas, socialistas y radicales anti-Macri). Ningún sondeo lo ubica por encima de los diez puntos. Muy lejos de su pretensión de terciar en la pugna entre Macri-Pichetto y los Fernández. Muy lejos del 20 por ciento que en las PASO de 2015 sumó la sociedad Massa-De la Sota. De confirmarse los pronósticos polarizadores para agosto, hasta las presidenciales del 27 de octubre es de esperarse la lenta agonía de las opciones alternativas (incluida la candidatura del liberal José Luis Espert). Entrará en escena el "voto útil".

Macri y Pichetto. (Foto: Federico López Claro)
Macri y Pichetto. (Foto: Federico López Claro)

Ese votante que en las PASO apostaría por una opción lateral, es la figurita difícil que desvela los comandos electorales de las principales fuerzas en pugna. "El voto difícil", lo ha bautizado Jaime Durán Barba.

Las exposiciones del politólogo son esperadas con entusiasmo en los cónclaves del oficialismo y la cumbre del miércoles en Parque Norte no fue la excepción. El consultor ecuatoriano, quien gusta de recordar la formación política que recibió cuando de joven estudió en Argentina ("pude conocer ese fenómeno cautivante llamado peronismo"), siempre renueva su batería de conceptos y sorprende con novedades.

Durán Barba asesora electoralmente a Macri desde la década pasada. Se le atribuye a él (y también a Marcos Peña) la notable eficacia electoral que exhibe el PRO en la Ciudad de Buenos Aires desde 2007. También el consejo a Macri de no competir en las presidenciales de 2011, cuando Cristina Fernández apabulló a la oposición con un impactante 54 por ciento. Durán Barba también delineó las estrategias exitosas de Cambiemos en las presidenciales de 2015 y en las elecciones de medio término de 2017.

Durán Barba. (FOTO.DYN/PABLO AHARONIAN)
Durán Barba. (FOTO.DYN/PABLO AHARONIAN)

En Parque Norte, precisamente, el dúo Durán Barba y Peña expuso el diseño de campaña ante la dirigencia de Juntos por el Cambio, la versión recargada y aumentada (con la suma de Miguel Angel Pichetto) de Cambiemos. "No es imposible que la elección se defina en primera vuelta", pronosticó el consultor. No dijo definirse a favor de quién. Este es su escenario: el oficialismo o el Frente de Todos podrían alcanzar los 45 puntos el 27 de octubre. Esa cantidad de votos, aunque supere al segundo por solo uno, ya dictamina un ganador. Ya no habrá necesidad de ir a un balotaje.

"Hay un 80 por ciento de votantes que se inclina para un lado o para el otro. No hay camino del medio", insistió Durán Barba. Del resto, "un 45 por ciento dice que nunca votaría a Cristina, y un 10 por ciento cree que 'no la votaría'", dijo. Por el contrario, "a Macri no lo votaría jamás un 25 por ciento y a un 26 por ciento le sería difícil votarlo", agregó. Es en este punto donde Durán Barba habla de salir a pelear "el voto difícil". La estrategia: dirigir todos los esfuerzos sobre una porción del electorado que no va más allá "del 15 o el 20 por ciento".

Marcos Peña está a cargo de ejecutar esa estrategia. "Marketing uno por uno". "Cuerpo a cuerpo". Mucho contacto por Whatsapp. "No tenemos que hablarle al convencido, sino a aquel que nos acompañó y hoy duda". El móvil de Peña lleva un sticker: "Defensores del Cambio". Un ejército de voluntarios que cuenta con un sitio web para enrolarse y desde allí salir a la caza del "voto difícil". Las redes sociales tienen pleno protagonismo. Un reciente análisis de "Comscore & Shareaable" (especializadas en investigación de marketing) indicó que Juntos por el Cambio casi duplica al Frente de Todos en publicaciones en Facebook, Instagram y Twitter.

Marcos Peña (Foto: Instagram)
Marcos Peña (Foto: Instagram)

"No hay que subestimar la disciplina y el rigor con las que el oficialismo se apega a sus diseños de campaña", evalúa el consultor Gustavo Marangoni. Acaso para cumplir con esa disciplina, desde la Casa Rosada se le sugirió al ministro Aguad que no desvíe el eje de campaña con frases desafortunadas (como fue minimizar la asonada militar carapintada).

El Frente de Todos cree tener unos puntos de ventaja a su favor. Alberto Fernández se recuesta en el apoyo de 14 gobernadores, muchos de ellos ratificados en recientes elecciones. "A ella la tienen escondida", chicaneó Horacio Rodríguez Larreta, en una verdad relativa. Es cierto; Cristina Fernández no protagoniza el día a día de la campaña. Pero sus apariciones mueven multitudes como ningún otro candidato. Entra y sale de escena montada en las presentaciones de "Sinceramente". Capital Federal, Santiago del Estero, Rosario, ayer Río Gallegos. "Vendrán varias presentaciones más en otras provincias", dicen desde el Instituto Patria, reservando la sorpresa del cronograma.

Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, en su primer spot de campaña.
Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, en su primer spot de campaña.

La fuerza macrista está convencida sobre un "nuevo cambio de clima" en el país: firma del acuerdo Mercosur-Unión Europea, el dólar planchado (a un costo de sostenerlo con tasas ruinosas por encima de los 60 puntos), los planes de reactivación de consumo, aumentos en la AUH, pensiones y planes sociales, la postergación de nuevos tarifazos. Son 200.000 millones de pesos volcados a la cancha. "Si la economía no nos hace ganar, al menos que no nos haga perder", resume el radical Mario Negri.

Pero todo relato, finalmente, debe tener cierto anclaje en la realidad para que su eficacia pueda sostenerse en el tiempo. El "nuevo clima social" del que habla el oficialismo tropieza con el 35 por ciento de pobres que arroja la nueva medición de la Universidad Católica Argentina. "Pobreza cero" fue, acaso, la principal consigna electoral de Mauricio Macri en 2015.