La embajada argentina aclaró que el exministro de Evo Morales no está en su sede de La Paz

Se trata de Carlos Romero, quien fue hasta el domingo miembro del gabinete del expresidente Evo Morales.

Carlos Romero. (DPA)
Carlos Romero. (DPA)

La embajada de Argentina en La Paz aseguró este lunes que el exministro de Gobierno de Bolivia Carlos Romero no se encuentra en su sede, tras haber renunciado a su cargo.

"La República Argentina respeta el derecho de asilo como un derecho fundamental consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos", subrayó la delegación diplomática en un breve comunicado.

"No obstante a ello, la Embajada argentina en Bolivia informa que el exministro de Gobierno Carlos Romero no se encuentra asilado en esta representación diplomática", concluyó la nota.

Romero es uno de los ministros que en cascada fueron anunciando su salida del Gobierno tras la renuncia del presidente Evo Morales y fue hasta el domingo miembro del gabinete del expresidente, quien renunció bajo presiones militares.

Antes de conocerse esta situación, el canciller argentino, Jorge Faurie, negó que el Gobierno de Mauricio Macri haya recibido un "pedido de asilo" de Morales.

Salvo los titulares de Exteriores, Diego Pary; de Defensa, Javier Zavaleta; y de Presidencia, Juan Ramón Quintana, el resto ha comunicado formalmente su renuncia.

Quienes constitucionalmente deberían suceder a Morales también han renunciado: el vicepresidente Álvaro García Linera, la presidenta del Senado Adriana Salvatierra y el presidente del Congreso Víctor Borda

La situación en Bolivia es de vacío de poder, porque la mayoría de los ministros que le acompañaban en su Gobierno han renunciado.

Tras un dictamen de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre irregularidades en el comicio, Morales había llamado a una nueva votación.

La decisión no fue suficiente para aplacar la convulsión social y los ataques a funcionarios y partidarios del gobierno.

Las fuerzas armadas le reclamaron a Morales que renunciara, mientras fuerzas de seguridad produjeron alzamientos en distintos puntos del país apoyados en las calles por grupos civiles opositores.