Detuvieron al hombre que aseguró por Whatsapp haber abusado de su hija de seis años en repetidas oportunidades

El hombre que admitió con audios de WhatsApp haber abusado sexualmente de su hija de seis años se encuentra detenido en Ezeiza, luego de once allanamientos policiales. Los vecinos habían intentado prender fuego su casa y su nombre fue tendencia en las redes sociales.

Se trata de Jorge Adrián Cardozo, de 30 años, que vive en El Jagüel, Esteban Echeverría. El sujeto habría grabado mensajes de voz en los que detallaba cómo había engañado a la niña para someterla sexualmente.

Según publicó el diario "Clarín", el presunto abusador será indagado en las próximas horas por la fiscal Magdalena González, en el marco de una causa "abuso sexual agravado por el vínculo y por acceso carnal".

Según informara el diario "Página/12", fuentes de la UFI N°3 de Esteban Echeverría, fiscalía a cargo de la investigación, explicó a ese medio que nunca existió la liberación del denunciado porque en ningún momento estuvo detenido, así como tampoco existió una denuncia formal.

El caso fue noticia por la aparición de unos audios de Whatsapp que se ligaron al padre de la nena, y donde daría detalles explícitos de una situación de abuso.

Sin embargo, las fuentes judiciales consultadas no pueden confirmar de dónde surgieron esos audios ni que pertenezcan a esa persona. "Supuestamente él vendió el teléfono y ahí aparecieron esos audios", señalaron.

Los agentes policiales acudieron luego de la denuncia de uno de los vecinos, de 28 años, quien contó que se enteró de lo que ocurría cuando un grupo de 10 a 14 personas se acercó a la casa del presunto abusador, lo insultaba y le gritaban "violador" y hacían referencias a los audios de WhatsApp.

En su declaración policial, el testigo explicó que luego  otro vecino le contó que "Chingui", tal es su apodo, había "perdido o vendido el celular" y que quien lo tenía en su poder encontró los audios y los viralizó, primero en un grupo de WhatsApp de la escuela 17 de El Jagüel.

De acuerdo a su declaración, el acusado de violar a su hija se defendía de los insultos diciendo que eran audios que le envió a su ex pareja, la madre de la menor. "para ofenderla".