Polemica entre la CEAL y EFASA por el colapso de las cloacas y los desechos industriales

Desde la compañía de agua culpan al frigorífico por el taponamiento de los principales colectores de la ciudad. La empresa asegura que no fue responsable.

Los vecinos del barrio del Carmen se sorprendieron el lunes por la tarde al encontrar las cloacas de la zona desbordadas y con un líquido blancuzco saliendo por algunos desagües. Tras el incidente, desde CEAL Agua aseguraron que el motivo del colapso de los principales colectores de la ciudad se debía a que una empresa había vertido desechos industriales no autorizados y que pensaban denunciarlos legalmente.

"El vuelco a la red cloacal de desechos industriales no autorizados, por parte de una industria local,  ha provocado un taponamiento de los principales colectores cloacales de la ciudad. Se están tomando las medidas correspondientes para denunciar el daño ocasionado ante las autoridades competentes", aseguraba el comunicado en referencia al frigorífico EFASA.

Luego de que trascendiera la noticia, desde el frigorífico EFASA difundieron un comunicado en el que explicaron que "se produjo un rebalse de la red pluvial y diferentes obstrucciones en las uniones de distintos desagües cloacales de la ciudad perjudicándose a los vecinos y a la empresa".

Luego de asegurar que los medios locales "quieren responsabilizar a la empresa de dichas obstrucciones", desde el frigorífico informaron que una escribana certificó "el estado del vuelco cloacal correspondiente al frigorífico, observando que el mismo se encontraba con el correcto flujo de agua".

Por último, la empresa propuso "comenzar a realizar encuentros para tratar aquellas otras problemáticas que conlleven a una mejor convivencia" con los vecinos y le exigieron a las autoridades "tomar las medidas preventivasnecesarias para evitar afectar nuevamente a los vecinos y a la empresa".

El tiempo dirá si el frigorífico tiró los desechos industriales en las cloacas sin ser autorizados o la falta de obras provocó que se tapone todo y perjudico a la empresa. Lo cierto es que en el medio siempre quedan los vecinos, que en medio de la tormenta, sufrieron el colapso de los desagües de sus casas y tuvieron que convivir con un olor nauseabundo.

Y de fondo, vuelven las dudas sobre la ubicación de una empresa de este tipo en medio de una zona residencial. ¿Qué dirán desde la municipalidad después de lo sucedido?