Ventas minoristas: abril, la mayor caída del año en Córdoba

Según la Federación Comercial de Córdoba (Fedecom), la baja fue de un 13,4% frente a igual mes del año anterior.

Las ventas minoristas de los comercios pymes de la provincia de Córdoba finalizaron el mes de abril con la mayor caída en lo que va de este 2019. La baja fue del 13,4% frente a igual mes del año anterior. Los datos surgen del relevamiento realizado por la Federación Comercial de Córdoba (Fedecom), y sus Cámaras y Centros Comerciales adheridos.

El dato a tener en cuenta es que en abril de 2018, respecto al mismo mes del año anterior, las ventas habían caído a su vez 5,2%.

Así, con el dato de abril, se acumula el 14° mes de caída consecutiva en las ventas minoristas (en marzo la caída fue del 10,4%; en febrero 11,1%; enero 11,5%; en diciembre del año pasado de 7,4%; en noviembre de 12,1%; octubre 8,6%; septiembre 8,3%; agosto del 5,2%; julio 2,8%; junio 2,9%; mayo 1,7%; abril 1,1% interanual; y en marzo del 0,4%).

La contracción se siente con especial intensidad en las localidades de Alta Gracia, Córdoba capital, Villa María, Las Varillas y en menor cuantía en San Francisco. "En abril coincidieron salarios viejos –ya que la mayoría de las paritarias recién están por comenzar a negociarse- con precios que no paran de crecer", reflexionó el presidente de Fedecom, Marcelo Stehli.

"Ya venimos marcando desde hace un tiempo a esta parte de la existencia de un combo letal que es el que forman las altas tasas de interés, la falta de crédito accesible para todos, la caída del salario real y la volatilidad del tipo de cambio que hace que el consumo de las familias siga cayendo", agregó.

En el mismo sentido, se esperanzó en que "el programa Precios Esenciales y los créditos anunciados desde Anses para los sectores más vulnerables, sumado al movimiento que empieza a verse en el interior de la provincia, producto de la cosecha récord del campo, puedan en mayo empezar a mostrar sus efectos".

Según el relevamiento, de los 15 rubros considerados, todos ellos alcanzaron valores negativos en la comparación interanual respecto a las cantidades vendidas.

Las caídas más pronunciadas se observaron en: Joyería y relojería (-18,9%); Electrodomésticos y artículos electrónicos (-17,8%); Bijouterie (-17,7%); Muebles de oficina y hogar (-17,5%); Bazar y regalos (-16,8%); Materiales para la construcción (-13,9%); Calzados y marroquinería (-13,7%); Indumentaria y lencería (-13,5%); Deportes (-13,4%).

Las variaciones en cantidades vendidas para los restantes rubros fueron: Materiales eléctricos y ferreterías (-12,7%); Textil-Blanco (-11,6%); Alimentos y bebidas (-10,8%); Juguetería y librerías (-10,6%); Farmacia, perfumería y cosmética (-9,6%); y finalmente, Neumáticos y repuestos (-9,4%).

Respecto a las modalidades de pago, el 42% de las operaciones que se realizaron en el mes fueron en efectivo, el 51% con medios electrónicos y 7% con créditos propios de los establecimientos comerciales.

La inestabilidad cambiaria en el marco de una economía en recesión, el deterioro del poder adquisitivo a causa de una tasa de inflación que no aminora su marcha, y la incertidumbre de los agentes económicos respecto al futuro inmediato son factores determinantes para explicar la mirada pesimista del sector comercial de cara al futuro inmediato.

De esa forma, las expectativas respecto a las ventas del próximo mes reflejan lo siguiente: un 10% de los comerciantes considera que aumentarán, un 28% que se mantendrán sin cambios mientras el 62% restante, que disminuirán.