En el mes de abril, frutas y verduras tuvieron alzas del 180% y superaron la inflación interanual general

Fue uno de los rubros que más creció. Entre ellas, se destaca la naranja, con un incremento de más del 500%.

Frutas y verduras, los productos que más subieron en el último año. Foto: La Voz.
Frutas y verduras, los productos que más subieron en el último año. Foto: La Voz.

En consonancia con los aumentos de la inflación, y principalmente a partir de las últimas cifras que reflejaron una suba generalizada de precios superior al 8% en el mes de abril, las frutas y las verduras fueron de los productos alimenticios que más aumentos percibieron en el último tiempo.

Frutas subieron un 180,8% en todo el año.
Frutas subieron un 180,8% en todo el año. Foto: José Gutierrez

El dato lo reveló la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA).

Los aumentos en frutas y verduras fueron superiores al 180%, si se tiene en cuenta abril del 2023 con respecto al mismo año del 2022. Por lo tanto, superaron en más del 70% a la inflación interanual generalizada.

La naranja aparece como el producto que más subió, con un 502,4%, y lo sigue la batata con el 412,5%. En tercer escalón aparece la lechuga, con el 297,8%. Cabe recordar que la inflación anual fue del 108,8%.

En cuanto a los rubros, el que más subió fue el de restaurantes y hoteles, con un 126,6% anual. Los subrubros verduras (185,3%) y frutas (180,8%), le siguen en aumento.

También, lácteos, carnes blancas, higiene personal y los panes se vieron incrementados por encima de la inflación en promedio.

Las verduras incrementaron un 185,3% entre 2022 y 2023.
Las verduras incrementaron un 185,3% entre 2022 y 2023.

El estudio, además, analizó que los servicios incrementaron un poco menos que los bienes (103% contra 110,9%). Así, explican que la inflación de abril “se encuadra en una dinámica inflacionaria que por quinto mes consecutivo se acelera” y que “posiblemente la suba abrupta del dólar paralelo haya tenido cierto grado de incidencia en el dato”.

“Tratándose de una economía descoordinada y plagada de incertidumbre, estas oscilaciones en el tipo de cambio libre se filtran en la formación de precios. Asimismo, la persistencia de la inflación (y su aceleración) estimula la indexación del sistema, por lo que un precio clave puede arrastrar a una buena porción del resto”, cerraron.