Esta es la verdadera razón por la que no hueles tu propio perfume

Es indiscutible que a todo el mundo le gusta oler bien durante todo el día, pero sin dudas, se convierte en una misión casi imposible. Si bien siempre se recomienda utilizar fragancias que vayan con la época del año, hay algunas cuestiones que se deben tener en cuenta para escoger el perfume que mejor vaya con cada uno.

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Por lo general, una vez que comienza el día, nos perfumamos y la presencia del aroma es instantáneo en nuestro olfato. Sin embargo, el efecto va disminuyendo con el tiempo y, aunque lo usemos a diario, no terminamos de resolver la interrogante de por qué no somos capaces de percibirlo durante toda la jornada.

La razón por la que no hueles tu propio perfume

Más rápido o ya pasadas unas horas, es inevitable que dejemos de percibir el olor de la fragancia que utilizamos. Sin embargo, esto tiene una explicación y se relaciona con el instinto y se conoce como ceguera nasal. Esto significa que la nariz se da cuenta de que no se trata de una amenaza ni de algo tóxico, por lo que deja de notarlo.

En consecuencia, se puede decir que el olfato se relaja porque el olor le resulta familiar. Este instinto también se activa con los olores del hogar y los de las mascotas. Aunque creamos que nuestro hogar no huele a nada, quienes lo visitan pueden percibir un aroma característico.

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8 consejos a la hora de elegir un perfume

Si bien puede ser que tengamos una fragancia característica, a la hora de innovar solemos caer en un grave error: probar muchos perfumes a la vez. El olfato se fatiga y dejamos de percibir las notas de fondo y de salida de las propuestas que probamos. Por eso, es que hay que tener en cuenta varias cosas al momento de elegir un perfume.

1. No perfumarse previamente ya que puede interferir en la percepción. Aunque puede costar salir de casa sin oler rico, es necesario tener un punto de partida neutral para poder hacer una buena elección.
2. Seleccionar las fragancias que más te llamen la atención y rociarlas sobre una tira olfativa.
3. Vaporizar la tira olfativa a unos 20 centímetros de distancia y oler a 2 centímetros de la nariz. Es importante que no roce para que no quede ningún olor impregnado.
4. Colocar las muestras formando un abanico para ir comparando las fragancias una con otra.
5. Si la nariz o el olfato se saturaron, hay que “recalibrarlos” y se puede hacer oliendo la piel de la parte interna del codo.

1. Cuando la selección sea acotada, probar sobre la piel. Se recomienda hacerlo en la cara interna de la muñeca.
2. No frotar las muñecas ya que rompe las notas del perfume.
3. Volver a olerlo después de un tiempo para ver cómo se adapta a tu piel y conocer cuál es la fragancia que se siente en tu cuerpo.