El Abrazo Contenedor de Tuly López

La actriz, autora, directora de teatro y docente tucumana nos habla de su trayectoria y su debut en la dirección de una obra de su autoría

La actriz Tuly López en una de sus presentaciones
La actriz Tuly López en una de sus presentaciones Foto: Cedida por Tuly Lopez

La multifacética actriz tucumana nos da una reseña de su vida y su obra. “Todas mis pasiones me combinan a mí, viven en mi”. Y esa combinación es la que le da ese impacto en el escenario y en la vida, en la que reparte su tiempo entre escuelas y tablas. Cuando da clases puede entreverse ese costado teatral que convierte un aula en un espacio mágico de juego. Y en el escenario hay algo de recreo infantil, de didáctica, de conocimiento profundo del niño interior. A través de sus palabras vamos desgranando su historia, sus comienzos y el camino recorrido, su debut como directora y el rol del Teatro como parte de la amalgama que construye una sociedad.

--¿Como llegaste al Teatro?

--Llegué al teatro por ser muy tímida. Cuando era chica se cambiaban las tapitas de gaseosa por un vaso, por alguna cosa en el super. Y yo iba al super a cambiar las tapitas y volvía con las tapitas porque no me animaba a hablar, no me animaba a hacer lo que iba a hacer. Entonces mi papá me dice “vos tenés que hacer teatro”. Él hasta el día de hoy se arrepiente (risas). Para ese tiempo fue que empecé la secundaria en la Escuela de Bellas Artes y ahí tuve como mi profe a la artista Elba Naigeboren, una gran actriz, referente del teatro tucumano. Con ella empecé a hacer teatro en la Escuela de Bellas Artes. Tipo 12 años, 13 años.

--De esas épocas iniciales, ¿qué obras te marcaron?

--Siempre, desde chica, fui al teatro porque mi mamá me llevaba, y fueron varias obras. No recuerdo todos los nombres porque era muy chica, pero yo iba a ver la Ulf, donde actuaba Juan Tríbulo y Elba Naigeboren, que fue una obra impresionante. También otra obra que me marcó era algo de Mendieta, en que actuaban Gloria Baerbuck, Mauricio Semelmann y Larry Janson. Fue otra de las obras que me flashearon, hace muchos años, por supuesto. Grandes actores. Y después, otra obra que me conmovió enormemente, ya con más conciencia dentro de lo que es el teatro y que a partir de ahí ya arranqué con la facultad también, fue “Juegos a la Hora de la Siesta”. Fue una producción donde había grandes actores que en ese momento eran estudiantes de la carrera y ahora grandes profesores y referentes del teatro tucumano como Jorge Gutiérrez, Patricia García, Fabián Bonilla, y Nerina Dip creo que también estaba. Como muchos que son ahora ya docentes de la universidad también.

Elenco y dirección de la obra "Abrazo Contenedor"
Elenco y dirección de la obra "Abrazo Contenedor" Foto: Gypsi Domínguez

--Sos actriz, autora, directora y también docente, ¿cómo se combinan todas tus pasiones?

--Más que combinarlas, ellas me combinan a mí. En realidad, yo soy artista, soy docente, y soy creadora. Creo que es imposible no tener un posicionamiento siempre ideológico de todas las acciones que uno realiza, y posicionamiento ideológico, creativo, performático. De manera que siempre han estado combinadas en mí.

--¿Puede el arte ser apolítico?

--Y, el arte jamás puede ser apolítico, porque toda expresión es política. El hecho estético es político, es una mirada del mundo, es una interpretación del mundo, es un proceso metafórico de una información que uno recibe de su contexto al mundo. Entonces, en realidad nadie es apolítico, siempre hay una postura por el sí o por el no, por cualquier cosa que uno emita, haga o genere un proyecto o una idea discursiva, está posicionándose en un espacio político, sea el que sea. Pero siempre es político.

--Desde esa posición siempre política, ¿cómo el arte puede generar cambios sociales?

--El arte es una propuesta, es una mirada, el cambio depende de quién lo percibe. Me parece que en ese diálogo entre el espectador y el arte es donde se puede producir algún tipo de comunicación y ya el cambio estará dado en relación a la persona. Yo creo que sí ejerce cambios en educación, en las personas, porque mínimamente tenés una percepción del mundo desde una mirada diferente, metafórica y eso es lo que hace que la gente lo pueda percibir. Sentir desde lo sensorial y es ahí donde está el cambio. Cómo percibir la realidad de una manera diferente.

--¿Cómo fue tu reciente debut como directora?

--Mi experiencia como como directora fue maravillosa, Esta obra se llama “Abrazo Contenedor”. Sale de una inquietud por la situación social de las infancias en la calle. El hecho de ser maestra me conecta directamente con las infancias y me parece que pude elaborar un proyecto, una obra, un discurso, una metáfora y una imagen que habla de una temática difícil, pero con una profunda ternura. El golpe bajo, digamos, de la obra, sería la realidad en sí misma. Además, muy contenta por estar junto a excelentes actores Franco Ochi, Araceli García, Natalia Yapura y Kiara Lopez (Relatora) que acompañan la propuesta, la interpretan, la exponen, la viven, la transitan. Y esto llega al espectador. Mi asistente de dirección Esteban Zelaya, un genio total con el cual hacemos también mucho de esto así que estoy muy contenta la verdad. ¡Me encanta! De hecho, ya estoy pensando futuros proyectos para seguir adelante en esta nueva incursión en la dirección teatral

--¿Cómo ves el futuro del teatro tucumano?

--El teatro tucumano es muy talentoso, hay diversidad, calidad, investigación. Es muy dúctil, variado, para todos los gustos, para todas las edades, es maravilloso. El talento que hay en Tucumán es increíble. La verdad que yo amo hacer teatro y también soy una gran espectadora de teatro. Voy a ver la mayor cantidad de obras que puedo, porque disfruto. Disfruto de eso que sucede ahí, en el aquí, en el ahora, en ese momento donde están afuera las pantallas, donde no hay otro interlocutor que seres humanos comunicándose, así que amo el teatro.

Araceli García y Franco Ochi en una escena de "Abrazo Contenedor"
Araceli García y Franco Ochi en una escena de "Abrazo Contenedor" Foto: Gypsi Domínguez