Buscan crear un fármaco para tratar un tipo de epilepsia infantil

La UNLP será la primera en Latinoamérica que busque un tratamiento para  el "Síndrome de Dravet".

Científico de la UNLP.
Científico de la UNLP.

Un laboratorio de investigación de la Facultad de Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) será el primero de América Latina en integrar una red de investigación que trabajará en la búsqueda de un fármaco para tratar el "Síndrome de Dravet", un tipo específico de epilepsia que resulta especialmente agresivo en bebés y niños.

Se trata del Laboratorio de Investigación y Desarrollo de Bioactivos (LIDeB), que recibirá financiamiento de la Fundación Dravet Argentina para profundizar la búsqueda de nuevos agentes anticonvulsivos específicos para esta enfermedad de origen genético y refractarios al tratamiento farmacológico en la mayoría de los casos, que compromete el desarrollo cognitivo de los niños afectados.

El Síndrome de Dravet no se describió hasta finales de 1970, y recién en 2003 se desarrolló un test genético que ayuda a diagnosticar la enfermedad; estimándose que la incidencia de la enfermedad es de 1 entre 20.000 nacimientos, lo que la encuadra en el grupo de enfermedades raras.

El presidente de la Universidad Nacional de La Plata, Fernando Tauber, destacó que "como universidad pública tenemos el deber de ocuparnos de enfermedades expulsadas por el mercado e ignoradas por los grandes laboratorios".

"La UNLP es la primera Universidad de América Latina que se ocupa de esta problemática y eso es para destacarlo", afirmó Tauber.

Este síndrome es una enfermedad muy agresiva, ya que los pacientes sufren convulsiones frecuentes y, en la mayoría de los casos, no responden bien a los tratamientos farmacológicos convencionales, incrementándose el riesgo de muerte súbita, alteraciones neurológicas y problemas cognitivos.

Alan Talevi, director del LIDeB explicó que "la línea de investigación histórica y más consolidada de nuestro laboratorio tiene por objeto la búsqueda de nuevas drogas antiepilépticas. Disponemos de una biblioteca de compuestos anticonvulsivos sumamente importante y en permanente expansión, que podemos orientar a la búsqueda de posibles tratamientos del síndrome de Dravet".