En fotos: los mendocinos salieron a la calle a festejar el pase de Argentina a la final del Mundial de Qatar

Los lugares más elegidos en Mendoza fueron calle Arístides y la Peatonal de Mendoza. Miles de personas se concentraron para ver el partido y ahora para festejar el triunfo.

Los mendocinos celebran en la calle el pase de la selección argentina a la final del Mundial de Qatar. Foto: Mariana Villa / Los Andes
Los mendocinos celebran en la calle el pase de la selección argentina a la final del Mundial de Qatar. Foto: Mariana Villa / Los Andes Foto: Mariana V

La alegría de que la Selección Argentina esté nuevamente en una final del Mundo desató la locura de todos los argentinos y Mendoza no fue la excepción: todos coparon las calles del centro para celebrar el triunfo de la Scaloneta ante Croacia en el Mundial de Qatar. Desde temprano las personas se reunieron en distintos puntos de la ciudad para alentar al conjunto nacional.

Los mendocinos celebran en la calle el pase de la selección argentina a la final del Mundial de Qatar. Foto: Mariana Villa / Los Andes
Los mendocinos celebran en la calle el pase de la selección argentina a la final del Mundial de Qatar. Foto: Mariana Villa / Los Andes Foto: Mariana V

Argentina pasó a la final del Mundial de Qatar y las calles fueron una fiesta

Este año, debido al cambio en las fechas del Mundial de Fútbol, muchos fanáticos decidieron seguir los partidos en bares, cafeterías y espacios públicos.

Al igual que en partidos anteriores, los lugares más elegidos fueron calle Arístides y la Peatonal de Mendoza. Las personas comenzaron a llegar a juntarse antes de que se jugara el partido y permanecieron en los bares hasta el final.

Los mendocinos celebran en la calle el pase de la selección argentina a la final del Mundial de Qatar. Foto: Mariana Villa / Los Andes
Los mendocinos celebran en la calle el pase de la selección argentina a la final del Mundial de Qatar. Foto: Mariana Villa / Los Andes Foto: Mariana V

Las calles se vistieron de celeste y blanco entre camisetas, sombreros, vuvuzelas y banderas. Quien no tenía su insignia podía conseguirla rápidamente, ya que había vendedores ambulantes por todos lados.

Los sonidos de los bombos, petardos y trompetas se mezclaron con los gritos de los hinchas y cuando el partido se dio por concluido, la Ciudad estalló en una gran fiesta.