Un criancero de Neuquén murió entre las montañas y su perro fiel lo acompañó hasta que lo encontraron

El hombre era de Aluminé. Perdió la vida mientras buscaba al resto de sus animales, y el noble can fue clave para que lo encuentren.

Su fiel compañero fue clave para que hallaran el cuerpo del hombre.
Su fiel compañero fue clave para que hallaran el cuerpo del hombre. Foto: LMNeuquén

La provincia de Neuquén es un lugar turístico por sus hermosos paisajes, los cuales, sin embargo, también pueden ser peligrosos. Un criancero de Aluminé murió mientras trabajaba en las altas montañas, y su perro fiel se quedó a su lado y fue clave en el hallazgo del cuerpo.

El sábado 29 de abril en horas del mediodía, se halló en aquellos altos rincones al criancero y werken, Roberto Caitruz, quien era más conocido como “don Tato”. En todo momento, fue acompañado por su mascota llamada “Pelusa”.

Su cuerpo fue hallado luego de estar por varios días desaparecido, lo cual alertó a familiares, conocidos y compañeros de trabajo. Según informó LMNeuquén, el grupo número 5 a cargo de José Mariñanco fue el encargado de llevar adelante su búsqueda.

Pelusa, el perro fiel que hizo que hallaran el cuerpo de don Tato.
Pelusa, el perro fiel que hizo que hallaran el cuerpo de don Tato. Foto: LMNeuquén

Encararon, de este modo, por el lado noroeste de la montaña con silbidos y llamados. De pronto, lograron oír un débil ladrido, y tras permanecer en silencio, pudieron identificar de dónde venía. Fue gracias a esto que los rescatistas dieron con el perro mestizo y su dueño sin vida.

Pelusa apareció entre los hombres y, a modo de brújula, los guió hasta el sitio donde el criancero falleció debido a las extremas bajas temperaturas de la zona. Ocurrió en la Cordillera de Calfiquitra, sobre la cuenca de Ruca Choroy, en cercanías de la localidad de Aluminé.

¿Quién fue el criancero de Aluminé que murió entre las montañas?

El hombre, miembro del Lof Mapuche Hiengueihual, falleció a sus 71 años. Entre sus trabajos, se lo recordará por ser un referente en la lucha por la recuperación de las tierras de Pulmarí. “Siempre en nuestra memoria HUERQUEN”, escribieron en el sitio oficial de la comunidad mapuche.

Además de los rescatistas, el Lonco Daniel Salazar del Lof Hiengueihual y el Lonco José Mariñanco de la comunidad Ruca Choroy encabezaron los grupos de colaboración. Primero lo buscaron, y luego ayudaron a rescatar su cuerpo.

Un criancero de Neuquén murió entre las montañas y su perro fiel lo acompañó hasta que lo hallaron.
Un criancero de Neuquén murió entre las montañas y su perro fiel lo acompañó hasta que lo hallaron. Foto: LMNeuquén

Durante esos dos días de búsqueda, también participaron Bomberos Voluntarios Aluminé, personal de la Comisaría 29, el grupo GEOP, también de Manejo del Fuego, Parques Nacionales, Seguridad Vial de la provincia, Defensa Civil de Aluminé y una ambulancia con un médico y enfermero pertenecientes al centro de salud intercultural Raguiñ Kien.

Contaron, por supuesto, con la presencia de de familiares, amigos, que iban junto a los miembros de las comunidades mapiches. Todos rescataron que el clima no acompañó durante ese tiempo, pues hubo intensos vientos, lluvias, mucho frío y fuertes nevadas.

Rolando Caitruz, sobrino del criancero, fue quien hizo la denuncia durante las primeras horas del jueves 27. El personal de rescate se redobló el sábado, y gracias a Pelusa dieron con don Tato alrededor de las 11:30 horas. La autopsia determinó que el hombre murió por una hipotermia.