Denuncian por acoso a un sacerdote de Alem

La madre de un adolescente de 16 años denunció a un sacerdote del rito ucraniano de Leandro N. Alem por acoso a su hijo mediante mensajes de WhatsApp. La denuncia fue realizada el 20 de abril, ante la Policía y la fiscalía local con pruebas contundentes.

Segúnindicó la denunciante, el acusado identificado como Luis, habría conocido al adolescente el 1 de enero, cuando el menor se fue a la casa de un amigo luego de la cena de Año Nuevo con su familia. Allí se encontraba el sacerdote dado que la familia se congrega en esa Iglesia. Esa misma noche el hombre comenzó a mandarle mensajes diciéndole al adolescente que quería llevarlo a su casa y que le gustaba su pelo, entre otras cosas.

El adolescente en primera instancia lo tomó como una broma de mal gusto, pero al pasar los días el hombre seguía escribiendo cada vez con mayor énfasis. En ese momento, el jóven decidió contarle a su madre lo que sucedía y fue el momento en que decidieron realizar la denuncia.

La prima de la denunciante contó el caso en las redes sociales con el objetivo de alertar a la población. La denuncia formal fue realizada el lunes 20 de abril ante la Comisaría de la Mujer y al día siguiente citaron a la denunciante a presentar las pruebas en el Juzgado de Instrucción V.

En las capturas de pantalla de los chats aportados por la mujer, se pueden ver frases como "Si querés nos vemos", "Qué linda te queda la ropa negra". Sexy, me imagino sin nada de negro ".

Según explicó la madre, ella buscó contactarse con los padres del otro menor para hacer una denuncia conjunta y que el cura había enviado mensajes del mismo tipo a su hijo. “Pero los padres de este chico, por miedo, decidieron proteger a este pedófilo y hasta me solicitaron que por favor no haga la denuncia, que ellos hablarían con las autoridades de la iglesia para que lo lleven a otro lado”, identificado la madre.

El domingo anterior a la denuncia, el sacerdote contactó a la mujer pidiendole perdón y solicitando que no hiciera la denuncia. “Fui tajante al decirle que le perdone Dios, que yo tenía que proteger a mi hijo. Vaya uno a saber a cuántos más estaré protegiendo haciendo público esto ”.