Dejó el bebé a su padrastro y no regresó más a buscarlo

En Garupá, muy cerca de Posadas, una mujer de 33 años se marchó de la casa de su padrastro dejand a su bebé y documentos.

Yesenia, la agente policial que amamantó al bebé abandonado en Garupá. (Nicolás Oliynek)
Yesenia, la agente policial que amamantó al bebé abandonado en Garupá. (Nicolás Oliynek)

Un bebé de tres meses fue abandonado por su madre en la casa de su padrastro que vive en Garupá, a pocos kilómetros de Posadas. Ante la situación acudieron efectivos del Comando Santa Clara de esta ciudad y una de las agentes Yesenia Medina, de 25 años, reaccionó ante la desesperación del bebé dándole de mamar.

Yesenia, que es mamá de Solange (5 meses) y de Enzo (9), le dio de mamar al verlo hambriento y desprotegido. "Mi primera reacción fue alzarlo, tomarlo en brazos. Salió de mí amamantarlo, le consulté al abuelo y me dijo que no había problema", contó la mujer a El Territorio.

El pequeño estaba lloroso y con frío, pero se durmió al cuando ella lo tomó en brazos y le dio el pecho. Es que como madre conoce muy bien del vínculo que se produce entre madre e hijo al momento de la lactancia.

La mujer que huyó sin llevarse a su hija, tiene 33 años y ya es madre de de otros cinco chicos que se encontrarían al cuidado de familiares.

Ahora le tocó ese papel de cuidador a Eleuterio P. su padrastro. Contó que este lunes por la noche llegó la mujer hasta su casa para pedirle el dinero que necesitaba para comprar una garrafa de gas. Algo que sería habitual en ella. 

Con la excusa de realizar la compra se marchó, pero no regresó y este martes a la mañana Eleuterio radicó la denuncia policial. En casa de su padrastro, la mujer dejó una mochila, pertenencias y sus documentos.

La comisario Grisela García dijo que actuó la Comisaría de la Mujer, pero la búsqueda en paradas de ómnibus y calles de la zona, no dio resultado. Según se informó después la mujer se habría presentado en la comisaría, pero el juez dispondrá a quién le otorga la guarda provisoria del bebé.

Foto de Nicolás Oliynek - El Territorio