El joven que pintaba para crack en Newell's y ganó el bronce en beach vóley

A los once años, Nicolás Capogrosso era el mejor arquero de Newell's en su categoría. Entrenaba todos los días en el predio Malvinas y muchos le auguraban un futuro en Primera. Sin embargo algo pasó, decidió irse del club y dejar el fútbol. Se pasó al beach vóley ahora acaba de obtener la medalla de bronce en los Juegos Panamericanos.

"Era un gran atajador de penales. Tenía la técnica de amagar para un lado y salir para el otro. Me salía muy bien. No sé si hubiera llegado al nivel que llegué con el vóley, pero era bastante bueno", contó el propio Capogrosso a Infobae.

Quienes lo conocieron en esa época, dicen que era incluso mejor que Ezequiel Unsain, el joven que tuvo un buen paso por Newell's, se fue por monedas a Defensa y Justicia y brilló en el último certamen en el que el Halcón de Varela obtuvo el subcampeonato.

Tenía talento, altura y personalidad, pero lo tocó hacer inferiores en la etapa más oscura de la entidad del Parque, por entonces comandado por una gavilla mafiosa liderada por Eduardo López. Así fue como un día llegó un directivo a la casa de los Capogrosso y les pidió u$s350 mensuales para mantener al chico en el club.

"Después del Pato Fillol, tu hijo es el mejor arquero que vi en la vida. Tiene un futuro bárbaro, pero como no están bien las cosas en el club tenés que pagar", les dijo este señor a los padres de Nicolás, que lo sacaron a los empujones. Al día siguiente fueron a buscar el pase del chico, que para entonces ya tenía ofertas de Central, Tiro Federal, Colón y Estudiantes, pero no se la dieron.

Incluso hasta el reconocido formador de juveniles, Claudio Vivas, habló varias veces con sus padres para convencerlo de llevarlo al Pincha. No hubo caso, Capogrosso hijo decidió alejarse del ambiente contaminado del fútbol y cambiar la número cinco por la pelota de vóley. "Todo lo que vino después fue grandioso. Tanto en Indoor como en el beach", indicó el jugador.

Ahora, tras superar a Canadá junto a su compañero Julián Azaad, obtuvo la medalla de bronce en Lima. "Este es el resultado del sacrificio que venimos haciendo. No puedo creer lo que logramos porque hay muchas cosas atrás de esto. Nos perdimos muchos cumpleaños y asados por estar lejos", explicó.