Sain sobre los homicidios en Rosario: “La policía no controla la calle de manera legal ni ilegal”

“Si no hubiéramos tomado medidas, la situación se hubiera desmadrado mucho más”, dijo el ministro de Seguridad provincial.

Marcelo Sain junto a policías (Gobierno de Santa Fe)
Marcelo Sain junto a policías (Gobierno de Santa Fe) Foto: Gobierno de Santa Fe

El ministro de Seguridad de Santa Fe, Marcelo Sain, aseguró que “la Policía provincial es muy mala reguladora del crimen porque ha perdido la calle y ni siquiera mantiene un control ilegal del territorio”, lo que explica que “el nivel de violencia del narcotráfico sea tan grande” en ciudades como Rosario, que cerró el año con 214 homicidios.

A modo de balance del primer año de gobierno, Sain señaló que le “ha tocado gestionar en un momento de una profunda transformación de la problemática criminal”. Identificó tres fenómenos: en primer lugar una “enorme fragmentación de los grupos narcos”, cuyos cabecillas están presos y son gerenciados por “soldaditos o delincuentes muy rústicos y violentos”.

También “un aumento estrepitoso de delitos predatorios cometidos por personas que no están en carrera criminal” como consecuencia de la crisis económica por la pandemia y la recesión previa; y la existencia de “una cultura juvenil narco, novedosa, en donde hay una suerte de identificación simbólica con el mundo narco que la hace positivamente valorada” en algunas barriadas populares de Rosario.

“La Policía de Santa Fe ha perdido el control de la calle. La presencia legal de la Policía a través de cualquier tipo de estrategia de prevención y control del crimen, pero también perdió la capacidad de control ilegal de la calle”, afirmó. Para Sain, la fuerza de seguridad “es una muy mala policía regulatoria del crimen”.

Explicó que, a modo de ejemplo, en otras provincias existen policías corruptos “que regulan ilegalmente el crimen y tienen control sobre el territorio, son la fuerza armada predominante frente al mundo criminal y establecen pautas de paz”. Al regular el crimen “lo que hacés es controlarlo y apropiarte de parte de la rentabilidad”.

El ministro entiende que “esas capacidades por parte de la Policía de Santa Fe se perdieron”, ya que “ni siquiera mantenía un control ilegal del territorio, por eso el nivel de violencia del narcotraficante es tan grande”. En esa línea, consideró que a Ariel “Guille” Cantero, el jefe de Los Monos que está detenido desde hace siete años pero cuya sombra asoma en varias de las disputas territoriales, “la violencia le ha sido redituable”.

Guille Cantero, líder de Los Monos, sigue apareciendo detrás de numerosos hechos delictivo pese a estar preso desde hace siete años.
Guille Cantero, líder de Los Monos, sigue apareciendo detrás de numerosos hechos delictivo pese a estar preso desde hace siete años.

“Es un fenómeno bastante particular, porque por lo general al mundo criminal la violencia no le suma, le resta. Sin embargo, a Guille Cantero le permitió mantener vigencia, control sobre ciertos territorios y organizaciones”, dijo Sain. A esto sumó que su banda “tiene capacidad de presión política y sabe que muchos muertos garantizan la condición de desestabilización de una gestión gubernamental”.

El ministro señaló que “eso se produjo por la ausencia de un Estado enfrente que pueda abordar y controlar ese nivel de violencia y dar una respuesta. No solo una respuesta preventiva, sino también una respuesta violenta legal”.

“No hay posibilidad de que haya una suerte de neutralización de la violencia criminal letal, sin una violencia estatal acorde a ese nivel de violencia”, afirmó. Y agregó que, sin embargo, “lo que hay enfrente es un Estado bobo, policías que no se enfrentan nunca con delincuentes, que no marcan la cancha de dominio territorio”, como sí afirma que ocurre en la provincia de Buenos Aires.

“Lo que hemos hecho es gestionar la coyuntura, tratar de mejorar el sistema tal cual está. Fuimos ideando toda una serie de planes operacionales, de seguridad preventiva y de investigación criminal que de alguna manera fueron atenuando el crecimiento de los crímenes predatorios”, detalló. “Si no hubiésemos hecho eso, el desmadre en materia de delitos predatorios hubiera sido aún mayor. A tal punto que en la provincia de Buenos Aires el 30 por ciento de los homicidios son en ocasión de robo, pero en la provincia de Santa Fe es el 5”.