¡Disfrutemos mientras podamos!

Llegó el invierno y, con él, la temporada perfecta para podar las plantas. Te doy algunos tips para no fallar en el intento.

Close up of Worker's Hands Cutting Red Grapes from vines during wine harvest in Moldova Vineyard.
Close up of Worker's Hands Cutting Red Grapes from vines during wine harvest in Moldova Vineyard.

Para el Centro y Norte del país ha llegado una buena época para podar, ya que las heladas no son muy intensas. "Disfrutemos mientras podamos", le dijo un jardinero a otro. Si vas a podar rosales, lo mejor es que sea a tres o cuatro yemas por encima de la poda del año anterior. Si podás frutales recordá que a damascos y ciruelos solamente se les quitan ramas mal insertadas, que se rocen entre sí, o de crecimiento vertical.

Evitá hacer podas de fructificación, porque la planta hará por sí sola un raleo de frutos sin futuro. A los durazneros sí, pero no saques más del 40 o 50 % del follaje. A la parra de patio, podala dejando solo tres yemas de las ramas nuevas del año. Y recordá que, fundamentalmente en damascos, la mayoría de las enfermedades ingresan por heridas de poda. Utilizá siempre herramientas afiladas y, entre planta y planta, esterilizalas con agua con un chorrito de hipoclorito.

+ Regiones

Norte + Troncos sin insectos

Si los árboles frutales y de hoja caduca han sufrido de insectos el año anterior, es probable que en los intersticios de sus cortezas hayan quedado alojados algunos huevos. Para eliminarlos, aprovechá un día cálido y soleado y lavá la cortezas con chorros de agua fuertes que tiren esos huevos al suelo. Así no nacerán insectos en las ramas y el tronco del árbol.

Centro + Hojas peligrosas

Retirá con cuidado las hojas quemadas por el frío de la especie Cyclamen pérsicum (violeta de los Alpes). Si quedan en el árbol podrían generar hongos que afecten a otras hojas o al bulbo. En ese caso no habrá remedio y la planta no vivirá para otra temporada.

Patagonia + Cuidá los bulbos

Los canteros con bulbosas serán los protagonistas del jardín en los próximos días. Pero ojo, evitá regarlos de más para que el bulbo no se pudra. Solamente van a necesitar una buena humedad en el suelo en el momento de la floración.

Los lectores consultan

Pablo Lerici me consulta qué especies de árboles podría colocar en su vereda sin que a la larga se levanten las baldosas, ya que el que tiene las está rompiendo.

Pablo, lamento no saber de qué ciudad me escribís, ya que cada una tiene su reglamentación de acuerdo con el ancho de la vereda y los servicios que pasan por debajo. Te sugiero consultar con tu municipio para no infringir ninguna norma. Al plantarlo, te, aconsejo colocar al lado un caño de 100 mm de diámetro y 80 cm de largo relleno con granza, y regar por el interior del caño; el agua saldrá en la profundidad y orientará las raíces hacia abajo, evitando que levanten otra vez la vereda.

Graciela, de Córdoba Capital, tiene dos citrus de semilla en una maceta y me pregunta cuándo florecerán y podrán comenzar a producir fruta. Las plantas tienen dos años, y le dijeron que si no se injertan, no lo logrará.

Graciela, los citrus de semilla producen flores y frutos después de los ocho años de vida. En este caso, el injerto no asegura fructificación; habitualmente se injertan para no contraer determinadas enfermedades que ingresan por las raíces. Debo aclararte que la planta obtenida de semilla tiene la carga genética de la fruta madre que vos consumiste y de un padre desconocido, por lo que podría haber variabilidad en la calidad de los frutos que se logren.

Miranda, de Córdoba capital, me cuenta que tiene en su patio unas plantas cuyas flores han sido atacadas por unos insectos que parecen pequeñas pulguitas negras, y ya se han contagiado a otras plantas.

Miranda, se trata de pulgones que succionan la savia debilitando a las plantas. Se controlan fumigando las partes afectadas con un preparado consistente en 50 g de Quassia amara (se compra en herboristerías) hervida en 2 litros de agua durante 30 minutos. Lo que sobra se puede guardar durante un año en una botella plástica, por si vuelve la plaga nuevamente.

María Cristina Zalazar envía la foto de un aloe vera con malformaciones granulosas en la base de las hojas y en el extremo de sus tallos florales, y pide consejos para curarlo.

María Cristina, se trata de un pequeño ácaro invisible al ojo humano que invade el interior de las hojas. Como defensa, la planta genera estos crecimientos anormales. Quitá todas las malformaciones con un cuchillo filoso y tiralas al basurero, luego rociá la planta con aceite emulsionable de invierno (se vende en viveros y agroquímicas) en la dosis que indique el prospecto para arañuela, y repetí en cuatro oportunidades con un intervalo de 15 días entre cada aplicación.