Alumnos aprenden lengua de señas para comunicarse con una compañerita sorda

En una escuela sanjuanina, los chicos aprendieron lengua de señas para incluir a una nena de la Primeria.

Sofía
Sofía

Sofía Rodríguez padece hipoacusia, tiene 11 años y desde los 6 asiste a la Escuela Albergue de Valle Fértil. Este año, los alumnos del establecimiento, directivos y hasta los porteros decidieron unirse para aprender lengua de señas y poder comunicarse con la nena, quien acaba de entregar el puesto que tuvo durante un año en el Cuerpo de Bandera de la escuela. La historia, escrita por la periodista Mónica Martín de Diario de Cuyo, emociona a toda la provincia.

La alumna es oriunda de Balde de Chilcas, un pequeño pueblo que se encuentra a casi 250 kilómetros de la capital sanjuanina. Maneja a la perfección la computadora y dicen que es buena jinete a la hora de andar a caballo. Sobre todo quienes la rodean aseguran que es una niña de buen corazón, que desde que nació asimiló con entereza que no escuchaba.

La institución educativa nunca había integrado a un alumno sordo o hipoacúsico, Sofía era la primera. No sólo significó un desafío para ella, sino también para todos los alumnos que no estaban preparados para afrontar la nueva realidad. Sin embargo, con ganas, esfuerzo y mucho amor por la nena que no tardó en hacerse querer, todos aprendieron lengua de señas. Organizaron talleres con intérpretes y todos fueron aprendiendo este nuevo lenguaje.

Según contó el director Luis Vega, fue clave la participación de la seño Rosita, un emblema dentro de la escuela. Es que la docente fue quien se encargó de hacer posible una integración eficaz. "Es la regalona de la escuela. La etapa que viene irá a la Agrotécnica", dijo el director.