Jardín América despidió a Perkins, unos de sus personajes pintorescos

Tenía 77 años y murió el miércoles pasado. Sentidas palabras en las redes sociales.

Perkins se llamaba Rufino y murió con 77 años.
Perkins se llamaba Rufino y murió con 77 años.

Rufino "Perkins" Diarte tenía 77 años y su muerte generó profunda tristeza en la comunidad de Jardín América que lo despidió con sentidos posteos en las redes sociales, sobre todo tras la publicación de viejas fotos en la página de Facebook "Jardín América del Ayer".

Perkins fue sepultado en el cementerio Nuevo Parque, lugar hasta donde sus restos mortales llegaron acompañados por un puñado de familiares, amigos y vecinos de toda su vida.

Los más memoriosos lo recordaron con sus ropas raídas, en ocasiones con excesivo abrigo para los meses de verano. Perkins tenía la costumbre de revisar basureros y a deambular sin rumbo por distintos puntos de la ciudad, sobre el asfalto y el empedrado caliente, que parecían derretir sus descalzos pies.

Sólo algún cigarrillo y una cajita de vino, cedida por algún vecino o comprada con las monedas que le daban, podía detener su "alocada" carrera hacia ninguna parte. Siempre solitario, sin molestar a nadie, a veces esbozando una sonrisa, Perkins formaba parte del paisaje, publicó Primera Edición en un artículo póstumo.

Meses atrás, un sobrino político logró sacarlo de las calles y pudo brindarle techo y comida, pero el miércoles la muerte se presentó ante él para su última llamada.

Muchas historias se tejieron en torno a su vida pero son pocos los que realmente tienen en claro los motivos que lo llevaron a convertirse en un eterno caminante. Algunos dicen que se recibió de maestro mayor de obras y que llegó a levantar varias viviendas; otros, que de joven leyó la magia negra, lo que hizo que sufriera un trastorno del que jamás se recuperó. Lo cierto es que hoy “Perkins” ya no está entre los jardinenses, que comienzan a extrañarlo.