La pegó con un emprendimiento de desinfección de tapizados y se expande por San Nicolás

Se trata de un rosarino que empezó a ofrecer por su cuenta un servicio original en el rubro de la limpieza y con la pandemia logró potenciar el negocio.

Martín Laiguera, titular de Pipí Cucú
Martín Laiguera, titular de Pipí Cucú

Martín Laiguera hizo un gran cambio en su vida cuando decidió abrirse camino en un nicho laboral poco explorado hasta ese momento: desinfección y limpieza de tapizados. Casi dos años atrás e invirtiendo los recursos que tenía, el emprendedor rosarino se lanzó a investigar sobre este servicio y ahorró para poder comprar una máquina específica que le permitiera realizar el trabajo.

Si bien comenzó por su cuenta, de a poco fue sumando más personas a su equipo y terminó por crear “Pipí Cucú Limpieza y Desinfección de Tapizados”, su propia empresa con la que logró profesionalizarse dentro del rubro y empezar a hacerse conocido en su ciudad y alrededores.

El joven rosarino nunca pensó que en la pandemia podía encontrar la posibilidad para crecer y expandir su negocio. Pero debido a los casos de coronavirus y la necesidad de muchas personas de mantener limpios los ambientes de sus hogares, el servicio que ofrece Pipí Cucú comenzó a ser más demandado.

Equipos de limpieza y desinfección
Equipos de limpieza y desinfección

Ahora, decidió expandirse y hacer foco en la ciudad de San Nicolás, una plaza que el emprendedor considera estratégica por su ubicación y la cantidad de personas y empresas alojadas allí. “Me interesaba mucho llegar a San Nicolás, creo que es una ciudad donde podemos apostar a crecer y brindar un servicio profesional que ayudará a muchas personas y pymes de la zona. Hoy en día, se puso en gran valor la necesidad de contar con espacios limpios y mantener un ambiente higienizado, eso es lo que venimos a ofrecer”, señaló Laiguera.

Un diferencial es el tipo de máquinas que utilizan para el proceso de limpieza y desinfección ya que, según Laiguera, son específicas para realizar este trabajo y traídas de afuera. Su objetivo es seguir equipándose para poder mantener los estándares de calidad en la atención que brinda a sus clientes.

“Mi idea fue abrirme lugar en un nicho muy poco desarrollado y que en muchos lugares ni existía. Trabajo con un equipo de personas muy sólido y realmente los tapizados quedan como nuevos luego de nuestro trabajo porque contamos con buenos equipos y con conocimiento, tanto de los materiales con los que tratamos, como del producto indicado para cada caso”, destacó Laiguera.