Se quedó dormido, chocó 4 Ferrari y pide que lo ayuden a pagar

No se sabe si es el espíritu navideño pero el accidente que protagonizó un joven desató una ola de donaciones inesperada en Taiwán.

Es que Lin Chin-Hsiang, de 20 años, volvía a su casa después de trabajar durante todo el turno noche como mozo en un restaurante de Taipéi, y decidió ayudar a su mamá e ir a hacer una entrega de mercadería.

La mujer tiene una papelera y antes atendía el local junto a su esposo pero éste falleció hace cinco años y Lin tuvo que dejar la universidad para ayudarla.

Fue así como el joven cansado tras una noche agotadora en el restaurante, y al volante de su vehículo Mitsubishi, salió a cumplir con la entrega del negocio familiar, que su madre no había podido realizar porque estaba enferma, y se quedó dormido cuando regresaba a su casa.

A las 5: 40 de la mañana del último domingo, Lin circulaba por el distrito de Shiding y chocó. Él salió ileso pero embistió 5 autos, de los cuales cuatro son exclusivas Ferrari que se encontraban en un evento de fanáticos.

Ahora el joven tiene que pagar los arreglos de su bolsillo. Según difundieron los medios de ese país, y suman 12 millones de dólares taiwaneses, que equivalen a US$ 390.000.

Por el momento, Lin logró recaudar US$ 24.000, que donaron entre 100 personas.

"Quería ayudar a mi mamá pero terminé empeorando las cosas. Estoy agradecido a todos los que se ofrecieron a ayudar. Debo haberme quedado dormido, no estoy seguro de qué fue lo que pasó", dijo Lin en una entrevista con la agencia de noticias AFP.

"Trabajaré duro para pagar los daños", agregó el joven.

Como su sueldo apelas supera los mil dólares, no puede afrontar los gastos. Y su seguro debe determinar cuánta plata le cubre. Ante esta situación, abrió una cuenta para que le donen plata y, sin imaginar que su historia desataría una ola de donaciones.

Los súper deportivos que chocó son 3 Ferrari 488 (una roja, otra azul y otra amarilla que cuestan 238.000 euros cada una ) y una Ferrari F12 blanca (tiene un valor de 311.000 euros).

Para facilitarle las cosas, los dueños de las Ferrari aceptaron que Lin les pague en cuotas.