Inseguridad que desilusiona: vendió su auto para abrir una peluquería y se la desvalijaron a los seis meses

Ocurrió en el barrio Padre Claret. Los delincuentes se llevaron todos los instrumentos de trabajo.

Vacío. Los delincuentes solo dejaron una tijera. (Gentileza: Fredy Bustos / El Doce)
Vacío. Los delincuentes solo dejaron una tijera. (Gentileza: Fredy Bustos / El Doce)

La inseguridad en Córdoba volvió a golpear a un comerciante de la ciudad que sufrió el robo de todos sus instrumentos de trabajo. La víctima, en este caso, fue un Octavio (23) quien vendió su auto para poder abrir la peluquería que, este lunes, fue vaciada por delincuentes.

Hace seis meses, Octavio decidió vender su auto e inaugurar “Margheritti barbershop” en barrio Padre Claret. Sin embargo, este lunes, el emprendedor se encontró con su negocio vacío. En diálogo con el Show del Lagarto, el joven contó que lo desvalijaron cuando el local estaba cerrado.

Los delincuentes ingresaron por la ventana del fondo después de romper las rejas. Se llevaron todas las máquinas de Octavio y también, las de un colega que trabaja en el lugar. Solo dejaron una tijera, indicó el joven.

“Hacía mucho que no me pasaba algo tan malo”, expresó Octavio. Y agregó: “Duele porque son cosas muy costosas. Vendí mi auto para abrir la barbería. Dije ‘voy a apostar, me animo’ y en seis meses me llevé la primera desilusión”.

La desilusión de Octavio, el emprendedor que fue desvalijado

La víctima comentó que hace unos años le había surgido la posibilidad de mudarse a Dinamarca, pero que prefirió emprender en Argentina. “Aposté, hice cursos de barbería, empecé a tomar clientela y crecer cada vez más. Y dije, ‘mi sueño es abrir una peluquería’”.

En el robo también se vio perjudicada su novia de 19 años, la cuál tiene un centro de estética en la planta superior del local. Los ladrones se llevaron la computadora de la joven.

Octavio agradeció a sus clientes y a la gente, ya que están colaborando, mediante transferencias de dinero, para que pueda adquirir de nuevo sus instrumentos. El barbero prometió “apostar a que todo sea como antes”. “A trabajar y romperse el lomo para volver a crecer de nuevo”, cerró la víctima.