El jefe de la Policía de Santa Fe, Miguel Oliva, dejó su cargo

Tras la renuncia del ministro de Seguridad, Rubén Rimoldi, el Gobierno rearma la cúpula de la fuerza.

Martín García tomó la posta mediante un decreto del gobernador Omar Perotti.
Martín García tomó la posta mediante un decreto del gobernador Omar Perotti. Foto: Gobierno de Santa Fe

A partir del cambio de mando en el Ministerio de Seguridad provincial, Miguel Oliva también dio un paso al costado este miércoles a la noche. El jefe de Policía de Santa Fe dejó su puesto en paralelo con la salida de Rubén Rimoldi, que fue reemplazado por Claudio Brilloni al frente de la cartera.

El rosarino duró menos de seis meses en el cargo. Desde la Casa Gris confirmaron que la conducción de la fuerza pasa a manos de Martín García, desginado en septiembre para completar la cúpula cuando se fue Emilce Chimenti.

A última hora de la jornada, el gobernador Omar Perotti firmó el decreto que nombra al subdirector general como sucesor de Oliva. De esta manera, la Policía de Santa Fe cambia de mando por tercera vez en la gestión del rafaelino, que empezó con Víctor Sarnaglia como máxima autoridad de la institución.

García estaba al frente de la Unidad Regional I cuando le ofrecieron el puesto de subjefe a nivel provincial. Desde entonces siguió en funciones en el departamento La Capital hasta noviembre, cuando Carlos Gaido fue designado como su reemplazante.

Después de esta renovación en la conducción de la fuerza, Brilloni debe cubrir algunas vacantes en el Ministerio de Seguridad de Santa Fe. La principal es la del cargo que dejó dentro de la cartera para reemplazar a Rimoldi.

¿Qué dijo el Gobierno de Santa Fe sobre la renuncia de Rubén Rimoldi?

Ante la salida de Rubén Rimoldi, el ministro de Gestión Pública, Marcos Corach, expresó este miércoles: “Este gobierno no niega la realidad, busca cambiarla por más difícil que sea”. El funcionario fue uno de los pocos que acompañó a Perotti para desplazar al comisario general retirado.

“La situación en el sur de la provincia es de una complejidad extrema”, señaló el rafaelino. A partir de ese diagnóstico, apuntó que el Ejecutivo está obligado a “ajustar permanentemente la estrategia y cambiar las piezas que sean necesarias para implementarla”.

Corach sostuvo que la administración actual en la Casa Gris “no se corre de su responsabilidad y trabaja sin especular ni hacer cálculos políticos”. A esto agregó: “No nos tiembla el pulso porque no perdemos de vista nuestros objetivos”.

Por su parte, la ministra de Gobierno de Santa Fe, Celia Arena, apoyó la decisión de Perotti y el desplazamiento de Rimoldi. “Vamos a seguir trabajando hasta el último día para trazar un claro límite entre el delito y la política”, afirmó.