Así luce hoy Allison Mack, la actriz liberada tras cumplir su condena por tráfico sexual

La actriz de televisión Allison Mack, reconocida por su participación en la serie “Smallville” como la amiga cercana de “Superman”, ha recuperado la libertad luego de cumplir una sentencia de tres años. Mack se declaró culpable de participar en el caso de tráfico sexual vinculado al grupo de culto NXIVM y fue condenada en 2021.

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Según los registros de la Oficina Federal de Prisiones, la actriz de 40 años fue liberada el lunes de la prisión federal en Dublin, California, cerca de San Francisco.

Cómo evitó que su condena sea mayor

Mack logró evitar una pena de prisión más larga al colaborar con las autoridades federales en el caso contra Keith Raniere, el líder de la secta, quien finalmente fue condenado a 120 años de prisión por cargos relacionado con el tráfico sexual.

La actriz desempeñó un papel importante al ayudar a los fiscales a recopilar pruebas que demostraban cómo Raniere estableció una sociedad secreta en la que las mujeres eran sometidas a un lavado de cerebro, marcadas con sus iniciales y obligadas a tener relaciones sexuales con él.

Aparte de Allison, los miembros del grupo también contaban con la presencia de una heredera de la fortuna de licores de Seagram, Clare Bronfman, y una hija de la reconocida actriz de televisión Catherine Oxenberg, conocida por su papel en “Dinastía”.

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Cabe destacar, para sorpresa de muchos, la acusada manifestó un público rechazo hacia Raniere y expresó abiertamente sentimientos de “remordimiento y culpa” antes de enfrentar su sentencia en un tribunal federal en Brooklyn, Nueva York. Allison dirigió una carta al juez en la que escribió: “Ahora es de suma importancia para mí decir, desde el fondo de mi corazón, lo siento mucho”.

“Me entregué a las enseñanzas de Keith Raniere con todo lo que tenía. Creía, de todo corazón, que su mentoría me estaba llevando a una mejor versión más ilustrada de mí misma. Dediqué mi lealtad, mis recursos y, en última instancia, mi vida a él. Este fue el mayor error y el mayor arrepentimiento de mi vida”, confesó la culpable.