El monumento más alto del país: la historia de amor y muerte debajo del “ala de avión” camino a Alta Gracia

Al transitar por la ruta provincial 5, es inevitable ver a uno de sus lados la enorme construcción. Qué significa y por qué es un símbolo de amor trágico.

El Ala es un imponente monumento que se puede observar en el camino entre Córdoba y Alta Gracia.
El Ala es un imponente monumento que se puede observar en el camino entre Córdoba y Alta Gracia. Foto: Web

A muy pocos kilómetros de la ciudad de Córdoba, sobre la ruta provincial 5 se encuentra una gigantesca construcción que simula el ala de un avión. Con unos 85 metros de altura, es el monumento más alto del país, superando al Obelisco porteño.

El monolito fue construido en 1935 y representa uno de los monumentos más enigmáticos de Córdoba. El famoso “ala” esconde debajo una historia de amor, tragedia y tesoros, así como también un misterio indescifrable que circula por la cultura popular local.

LOS PROTAGONISTAS DEL “ALA DE AVIÓN” DE CÓRDOBA

Detrás de la historia del ala, hay una famosa pareja de la Argentina del siglo XX: Raúl Barón Biza y Myriam Stefford. Ella, nacida en 1905 en Suiza, hija de un italiano y una alemana, era actriz y participó en varias películas como La duquesa de Chicago, Póker de Ases y una primera versión de Moulin Rouge.

En 1928, conoció al escritor millonario Raúl Barón Biza en Venecia. Él era argentino, nacido en Buenos Aires y militante de la Unión Cívica Radical (UCR). El amor fue tal que dos años más tarde se casaron en la basílica de San Marcos en Italia. Tras la boda, Myriam abandonó su carrera como actriz y se mudó a Argentina, donde descubrió una nueva pasión: la aviación.

monumento el ala camino a alta gracia
monumento el ala camino a alta gracia Foto: Web

EL TRÁGICO VIAJE DE MYRIAM STEFFORD POR ARGENTINA

Con un espíritu aventurero, el matrimonio comenzó a imponerse retos de aviación, como unir Buenos Aires con Río de Janeiro en una avioneta. Fue así que Myriam se emprendió a realizar el viaje por 14 capitales del país, acompañada de su instructor Ludwig Fuchs.

Myriam Stefford emprendió viaje en agosto de 1931.
Myriam Stefford emprendió viaje en agosto de 1931. Foto: Web

La mujer partió en agosto de 1931 desde el aeropuerto de Buenos Aires. Tras algunos problemas mecánicos, tuvieron que aterrizar de emergencia en Santiago del Espero y en Jujuy. Debido a esto, Barón Biza les envió otra aeronave para utilizar y así, poder concretar la travesía. Sin embargo, el 26 de agosto la avioneta cayó en una zona desértica de San Juan, provocando la muerte de Myriam Stefford y su instructor.

La avioneta luego del accidente en San Juan.
La avioneta luego del accidente en San Juan. Foto: Web

Los cuerpos fueron trasladados en tren hasta Buenos Aires y se velaron a cajón cerrado. Al día siguiente, el féretro de Stefford, cubierto de orquídeas, fue depositado en el panteón de la familia Barón Biza en el cementerio de Recoleta.

EL ALA DE AVIÓN, UN SÍMBOLO DE AMOR TRÁGICO EN CÓRDOBA

El viudo dejó varios testimonios materiales y arquitectónicos para homenajearla, como un monolito de 14 metros en el lugar del accidente. Sobre una de las caras mandó a escribir un fragmento de un poema de Petrarca y frases que aluden a su amor por la mujer.

Sin embargo, en 1935 fue por algo mucho mayor. Le encargó al ingeniero Fausto Newton que levantara un mausoleo fastuoso con forma de ala de avión en el paraje Los Cerrillos, en el camino que une Córdoba y Alta Gracia. Allí el escritor tenía una estancia con olivares, en la que había convivido con Stefford.

El Ala, un monumento de amor trágico en Córdoba.
El Ala, un monumento de amor trágico en Córdoba. Foto: Web

La construcción comenzó el 26 de agosto de 1935, a cuatro años de la tragedia, y culminó el 30 de agosto de 1936. En la edificación de 85 metros de altura y 15 de cimentación, participaron unos cien obreros polacos y argentinos. En una cripta de seis metros de profundidad, fue colocado el féretro de Stefford, recubierto por una reja de acero. Y debajo, supuestamente entre los cimientos, sus joyas, como un diamante llamado Cruz del Sur de 45 quilates.

Se dice que tanto su cuerpo como sus joyas están protegidos también con un complejo dispositivo de explosivos que estallaría en caso de que alguien quisiera profanarlos. Incluso, en una lápida de mármol negro se leía: “Maldito sea el que profane esta tumba”.

La puerta de ingreso al mausoleo.
La puerta de ingreso al mausoleo. Foto: Web

El mausoleo cuenta con 444 escalones y una lápida escrita con la frase “viajero, rinde homenaje con tu silencio a la mujer que, en su audacia, quiso llegar hasta las águilas”. Raúl Barón Biza está enterrado, por pedido propio, debajo de un olivo, a pocos metros de Myriam Stefford.

UNA MUERTE DUDOSA: LA TRÁGICA HISTORIA DE AMOR DEL MONUMENTO EN CÓRDOBA

Más allá del amor que le juraba Barón Biza, algunas leyendas sostienen que el hombre descubrió un supuesto amorío entre Myriam y su maestro, por lo que habría enviado el segundo avión con fallas. Esa hipótesis está bajo investigación desde 2015 debido a que una historiado descubrió en fotos periodísticas de la época algunos detalles extraños en los cadáveres: aparentes heridas de bala en sus rostros y ambos cuerpos intactos a pesar del incendio de la avioneta. Además, siempre estilaban con uniformes de pilotos cuando viajaban, pero en las fotos aparecen con ropa de civil.

Raúl Barón Biza y Myriam Stefford.
Raúl Barón Biza y Myriam Stefford. Foto: Web